La confianza sigue siendo la base de cualquier relación, también en el mundo digital
18 marzo, 2019
Por qué Marketing y Big data se han convertido en un matrimonio tan bien avenido
1 abril, 2019
Muchos de los que se dedican a tareas artísticos, todavía se resisten a hacer de la tecnología una herramienta habitual en sus procesos de trabajo.
El miedo a que la automatización eche por tierra la creatividad es una de las principales razones de este rechazo.
Sin embargo, la digitalización y la tecnologización no son una opción hoy en día y, desde luego, no tienen por qué ser un enemigo para las ideas, sino que pueden convertirse en un facilitador.
A medida que se populariza el uso de tecnologías como la inteligencia artificial o la realidad aumentada para enriquecer las experiencias de los usuarios, los profesionales del diseño y la creatividad deben sumarse a ellas y, sobre todo, ponerlas al servicio de sus ideas.
Les mostramos, de la mano de Fast Company, 3 razones que demuestran que la inteligencia artificial puede ser un valor añadido al trabajo creativo y al diseño.
1. La tecnología hace el “trabajo sucio”
El ahorro de tiempo que genera la automatización de tareas rutinarias hasta ahora ejecutadas por humanos, deja más tiempo a los profesionales para dedicar sus esfuerzos a lo verdaderamente importante: la creatividad.
Herramientas como el scanning 3D permite a los diseñadores pasar de un objeto 2D a uno 3D en tiempo récord pudiendo modificar y editar sobre el proyecto con todas las facilidades y reduciendo, además, las barreras de entrada de este ámbito.
2. La inteligencia artificial reduce las posibilidades de fracaso
A la hora de crear un proyecto, es complicado saber si el resultado final será atractivo para los consumidores.
La capacidad de técnicas como el machine learning para analizar una ingente cantidad de datos de los consumidores y realizar predicciones sobre qué funcionará y que no, permite mejorar el trabajo y reducir el riesgo.
3. La inteligencia artificial trabaja continuamente
A diferencia de las personas que necesitamos dormir, comer y tomarnos nuestro tiempo de descanso, las máquinas pueden trabajar constantemente y de una manera más rápida y eficiente.
Procesos que antes llevaban semanas, ahora pueden hacerse en apenas unos días consiguiendo satisfacer las altas expectativas de los usuarios que demandan una oferta de contenidos altamente personalizados, muy variados y en el menor tiempo posible.
Fuente: Marketing Directo